Autor | Lucía Burbano
Existe mucha literatura sobre las ciudades inteligentes y grandes ideas que muchas veces se quedan en eso, en ideas. En el caso de Columbus, la capital de Ohio, su estrategia "smart" puede medirse con resultados concretos que ejemplifican cómo la tecnología es el mejor medio para alcanzar el bienestar social y medioambiental.
El liderazgo de la ciudad partió de su apuesta por la movilidad, de la que se ha convertido en referente. Un éxito que no ha provocado que la urbe norteamericana se duerma en los laureles, al contrario, ha sido el impulso para buscar cotas aún mayores y que está dispuesta a compartir, ya que han recibido la visita de delegaciones de 80 ciudades y 20 países con las que ha divulgado su fórmula "secreta".
Referente de la movilidad inteligente
En 2016, Columbus compitió y venció a otras 77 urbes estadounidenses en el llamado Smart City Challenge organizado por el Departamento de Transporte. Este triunfo vino acompañado de un cheque por valor de 40 millones de dólares por parte de la administración y otros diez millones de la de Paul G. Allen Family Foundation para desarrollar proyectos de movilidad sostenible con la tecnología como eje y lograr estos objetivos:
- Descarbonizar y modernizar la red de transporte
- Adoptar una flota de vehículos eléctricos
- Expandir y adoptar el tránsito multimodal
- Aumentar la infraestructura de recarga eléctrica
Los pilares de Columbus Smart City
A modo de mandamientos, la capital de Ohio articula su estrategia ‘inteligente’ a partir de tres acciones y sus respectivos proyectos:
1. Sentar las bases con el desarrollo de un sistema operativo holístico, abierto e integrado, canalizando las inversiones adecuadas para establecer tecnologías de movilidad autónomas, eléctricas y conectadas.
Proyectos: Sistema operativo Smart Columbus, estaciones de carga, entorno de vehículo conectado
2. Prueba, aprende, escala. Columbus ha sido elegida para modelar el funcionamiento de las nuevas tecnologías en una ciudad real, con personas reales, para resolver problemas reales. Las pruebas y los comentarios que aporten los usuarios validan el proceso de recopilación de datos. En caso de fallar, prometen hacerlo rápido. En caso de éxito, afirman que lo harán escalable a otras experiencias.
Proyectos: Smart Mobility Hubs, asistencia de viaje prenatal, lanzaderas autónomas
3. Aceptar el cambio como forma de vida. Cualquier proceso novedoso implica un cierto grado de incertidumbre que la ciudad quiere modelar desde un proceso que involucre a todos sus habitantes. Esto significa inspirar a políticos y ciudadanos mediante la colaboración y asociación para crear programas, presentar nuevas soluciones y promover su adopción. Este proceso será gradual y se llevará a cabo durante la próxima década.
Fondos bien empleados
En 2020 terminaba el plazo máximo para adjudicar estas subvenciones a proyectos de movilidad concretos. Columbus hizo los deberes y puede cuantificar sus logros en movilidad inteligente y sostenible en ocho proyectos completados:
- Vehículos autónomos eléctricos conectados: durante la pandemia, Linden LEAP, el primer servicio de transporte público autónomo, acercó 130.000 comidas y 15.000 mascarillas a los vecinos más desfavorecidos de la ciudad.
- Asistencia para viajes prenatales: 143 mujeres embarazadas con cobertura de Medicaid participaron en ‘Rides4Baby’, un estudio de investigación de asistencia para viajes prenatales que quiere demostrar la efectividad del transporte compartido.
- Pivot, la aplicación móvil que planifica viajes multimodales y ofrece información sobre opciones de transporte, tiempos de viaje, distancia y flexibilidad.
- Más de 1.000 vehículos participaron en la red de vehículos conectados con el objetivo de incrementar la seguridad, ya que estos vehículos se comunicaron entre ellos en intersecciones que registran la tasa de accidentes más alta de la ciudad.
- La aplicación móvil ParkColumbus, que facilita la búsqueda y el pago de estacionamiento en la calle.
- Construcción de seis centros de movilidad inteligentes con quioscos interactivos, cuatro estaciones de carga de patinetes y bicicletas compartidas y una estación de carga de vehículos eléctricos.
- En un año, 31 personas con discapacidades cognitivas utilizaron la aplicación WayFinder para realizar 82 viajes en transporte público en lugar de depender del transporte de un cuidador y fomentar su independencia.
- Prueba piloto del sistema operativo Smart Columbus, que transmite datos sobre el entorno del vehículo conectado cada 15 segundos.
Acelerando proyectos gracias a la colaboración
Uno de los motivos que hizo a la ciudad ganadora del Smart City Challenge fue la unión del sector privado liderado por su alcalde y The Columbus Partnership, una organización sin ánimo de lucro formada por los CEO de las 75 empresas más grandes de la región.
En conjunto, el sector privado se comprometió a invertir 90 millones de dólares en iniciativas alineadas con los retos propuestos por el Departamento de Transporte para contribuir al desarrollo de su concepto de ciudad inteligente.
Como ya se ha comprobado que el mejor liderazgo es aquel que guía a través del ejemplo, estas compañías han colaborado en la puesta en marcha de 1.200 pruebas con vehículos eléctricos y han creado, para sus propios empleados, un programa que fomenta que compartan vehículo para desplazarse al trabajo y reducir la presencia de automóviles con un solo ocupante.
Según Smart Columbus, este consorcio ha generado un impacto económico de 720 millones de dólares y ha creado 3.870 empleos directos o indirectos.
Los retos del futuro
El desarrollo inteligente de Columbus continúa avanzando a partir de tres pilares en los cuales la colaboración es un ingrediente principal además de la tecnología.
- Sostenibilidad. Acelerar la adopción de tecnologías climáticas para conseguir la neutralidad de carbono en 2050. Esto incluye impulsar proyectos que faciliten la transición de la región hacia energías renovables.
- Digitalización. Democratizar y agilizar trámites con la administración local que consigan hacer del ayuntamiento una institución más inclusiva. Algunas iniciativas incluyen un mejor acceso a los servicios sociales en colaboración con el banco de alimentos Mid-Ohio Food Collective y probar soluciones accesibles de Internet para cerrar la brecha digital que divide a la ciudad.
- Emergente. Mantenerse a la vanguardia de la tecnología urbana disruptiva que beneficie a la comunidad, dando a la ciudad una ventaja competitiva basando su desarrollo económico en el talento. Esta estrategia proveerá a los residentes de una experiencia más fluida con las infraestructuras, los sistemas y los servicios locales, lo que aumentará el acceso a oportunidades y mejorará la calidad de vida de los ciudadanos.
Todo este repertorio de ideas se conjuga en el Smart Columbus Experience Center, donde se exhiben las tecnologías inteligentes que definirán la movilidad y que los visitantes pueden probar para experimentar cómo nos moveremos en un futuro que cada día está más cerca.
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