Autor | M. Martínez Euklidiadas
China es el país del mundo que más área marítima ha recuperado mediante una estrategia de ‘recuperación de tierra’, lo cual es coherente dadas sus dimensiones. Es el país con más población del planeta, el tercer país con más área del mundo y uno de los que más costa exterior tienen.
¿Cuántos km^2^ de tierra ganó China al mar?
Se estima que China ha recuperado más de 13 000 km^2^, según publicaba en 2008 el portal ECNS. Esta área fue ocupada desde 1949 a 1990. Se estima que en la actualidad el área es mayor, aunque se desconoce la cifra exacta. Según los proyectos públicos publicados tras 1990, la cifra total podría alcanzar con facilidad los 20.000 km^2^.
Algunos de los más famosos son el caso de Cantón, donde la ciudad de Shantou reclamó más de 150 km^2^ en 2004; los 310 km^2^ reclamados por la provincia de Liaoning para construir un complejo industrial; o los increíbles más de 1.800 km^2^ recuperados por la provincia de Jiangsu antes de 2020.
Junto a Juangsu, el Mar Amarillo (parte del Mar de la China Oriental), se estima que tiene el 65% de sus marismas ‘recuperadas’. Es decir, arrasadas para poder construir por encima.
¿Cuándo comenzó China la recuperación de tierras?
La recuperación de tierras empezó en China hacia 1949 de forma generalizada, aunque regiones como Macao la practican desde hace siglos y otras, como Hong Kong, empezaron poco después de que el comodoro Gordon Bremer reclamase la región como colonia británica en 1841.
El caso de Hong Kong
Hong Kong solo iba a ser un puerto franco para Reino Unido, pero el Tratado de Nankín (1842) tras la Primera Guerra del Opio dio como resultado una colonia permanente. Y los británicos modificaron el entorno.
Si en una primera fase se ocuparon las marismas y los pantanos para ganar área útil, las grandes expansiones llegaron más de un siglo después, cuando en 1991 se construyó la totalidad del aeropuerto internacional sobre una isla artificial.
De esta época expansionista son también las primeras manifestaciones en contra, debido principalmente al enorme deterioro ambiental. En 1997 se publicaron las primeras ordenanzas para proteger el área del puerto. Por desgracia, otras ciudades han seguido su ejemplo anti-ecologista, como ocurre con Filipinas y Dubái.
El caso de Shenzhen
Shenzhen es una región que desde 1990 ha sido muy activa reclamando el mar para la ciudad. Rodeada de islas, ha sido relativamente fácil "rellenar los huecos". Por desgracia, a costa de un inmenso impacto ambiental.
Por su proximidad, Shenzhen y Hong Kong se están perjudicando respectivamente en su crecimiento, dado que ampliar las tierras ganadas de uno encarece que el contrario haga lo propio. Y al triángulo se suma Macao.
El caso de Macao
Muy próximo a Shenzhen y Hong Kong, Macao también ha recuperado un importante volumen de tierras desde el XVII, cuando la isla de Macao se convirtió en la península de Macao. Entre 1912 y 2015 la península casi triplicó su área.
¿Por qué China inició recientemente la recuperación masiva de tierras en el mar de China Meridional?
El mar de China Meridional, llamado también mar del Sur de China y mar de Filipinas Occidental, es un complejo espacio de soberanía reñida desde hace muchas décadas. También es un importante paso comercial, motivo por el que seis países se disputan las aguas. A la izquierda, reclamaciones por país. A la derecha, las fronteras que los países admiten como válidas.
La zona más tensionada es sin duda las islas Spratly, un conjunto de archipiélagos ocupados por hasta seis países del entorno. De hecho, en muchas de ellas ha hecho falta ‘recuperar’ tierra porque no había ni un metro cuadrado de terreno sobre el nivel del mar. China es uno de los países que ha construido helipuertos y cuarteles en una decena de islas, junto a Vietnam, Taiwán, Filipinas, Malasia y Brunéi.
Islotes como Nariveles, Ardasier, Guateron o East London tienen bases militares de diferentes países, todas construidas a base de ganar terreno al mar al transportar miles de toneladas métricas de sedimentos desde diferentes países. El impacto ambiental, qué duda cabe, es altísimo.
Imágenes | Barbara Ann Spengler, Timothy135, Google Maps, Bourrichon, Voice of America, U.S. Department of Defense