Autor | M. Martínez Euklidiadas
La arquitectura sostenible supone una forma de arquitectura en la que se persigue minimizar el impacto de las edificaciones, la preservación del entorno, la optimización de recursos, y hasta el cuidado de las personas o la economía tras la obra. Debido a la actual presión de los humanos sobre el planeta, la arquitectura sostenible es ya ineludible y el único futuro viable.
Principios fundamentales de la arquitectura sostenible
El concepto de arquitectura sostenible nace en 1987 con el informe de la ministra Gro Harlem Brundtland titulado Nuestro futuro común (llamado también Informe Brundtland), en que se usó una definición genérica de sostenibilidad más allá de las ambientales, que sin duda forman el núcleo duro de los principios fundamentales de la arquitectura sostenible:
● El impacto en construcción, operación y derribo ha de ser el mínimo posible.
○ Han de usarse materiales locales, de baja energía y CO2 incorporados.
○ Se han de priorizar los sistemas de climatización pasivos, así como fuentes de energía hiperlocal.
○ Al final de la vida útil, las materias que conforman el edificio han de poder ser reutilizadas.
● La edificación ha de diseñarse y ser cuidada para una durabilidad tan amplia como sea viable. Ha de evitarse el derribo y construcción continua.
● Se ha de evitar en la medida de lo posible la infrautilización del inmueble, mediante salas multiusos.
Además, la arquitectura no está aislada, sino que se inserta dentro de un urbanismo cuyo impacto también debe ser reducido mediante sus propios principios.
Beneficios y ventajas de la arquitectura sostenible
Obviamente, una reducción significativa del impacto ambiental es una ventaja a tener en cuenta. Pero, además, existen cobeneficios como mejorar la salud y bienestar tanto de ocupantes como de habitantes de proximidad.
Cuando un edificio retira las líneas de gas para climatizarse mediante bombas de calor, la contaminación química local se ve reducida. Y, si además usa climatización pasiva, se evita la contaminación térmica local.
Con frecuencia, los edificios de alta utilización (multiusos) se convierten en germen del tejido social y asociativo del barrio, y nexo de nuevos movimientos sociales.
No hay que olvidar que un uso más eficiente de los recursos suele ser también bastante más barato a largo plazo.
¿Cuáles son las tendencias actuales en arquitectura sostenible?
La popularidad de la arquitectura sostenible no deja de aumentar a medida que su necesidad se hace patente. Algunas de sus tendencias son:
● Combinar una base de hormigón más una estructura de madera para pisos superiores en edificios de construcción mixta.
● Priorizar el diseño pasivo es crítico tanto en sostenibilidad ambiental como económica a largo plazo: si el edificio se refrigera él solo, mejor en un escenario Net Zero.
● Trazabilidad de materiales locales de bajo impacto incorporado, y vuelta a los materiales ligeros como bambú o tejidos. Esta trazabilidad permite la futura circularidad de materias.
● En la trama urbana, construir edificios conectados con redes de transporte público colectivo, ya que una parte significativa de la edificación depende de su aislamiento y necesidad de uso de coche.
Los retos de la arquitectura sostenible
Probablemente, el mayor reto de la arquitectura sostenible sea el aparente precio elevado frente a la arquitectura insostenible, cuyo bajo importe no se debe a ser más eficiente sino a externalizar los costes. Materiales que cuidan el medio ambiente tienen un precio más elevado, pero un coste más bajo. El precio de lo insostenible ha de cubrir su coste.
Imágenes | Vitalii Mazur, Pawel Czerwinski