Autor | M. Martínez Euklidiadas
Fujisawa Sustainable Smart Town es un pequeño barrio experimental en la ciudad de Fujisawa. Patrocinado por Panasonic y otras empresas locales, busca desarrollar soluciones tecnológicas para reducir el impacto de los seres humanos en el mundo, así como comunidades experimentales centradas en la persona.
¿Qué es Fujisawa Sustainable Smart Town?
Fujisawa Sustainable Smart Town, conocido como Fujisawa SST, es un proyecto de smart city construido ad hoc por Panasonic y otras marcas. Formalmente es un barrio de Fujisawa, en la prefectura de Kanagawa (Japón), situado a unos 50 kilómetros de Tokio.
Con una extensión de 19 hectáreas y lugar para algo más de 1.000 hogares, tiene por objetivo principal investigar sobre tecnologías que puedan ayudar a reducir el impacto ambiental de las ciudades. Soluciones principalmente de la marca Panasonic, aunque también hay marcas como Tokio Gas, Yamato Transport o Sohgo Security Services, menos conocidas fuera de Japón.
Uno de los retos marcados fue el de reducir las emisiones de CO~2~ un 70% en comparación con los niveles de 1990. Se entiende que para un urbanismo similar, ya que Fujisawa SST prioriza la vivienda unifamiliar y el modelo de desplazamiento del coche y por tanto se ve incapaz de alcanzar los niveles promedios de Fujisawa, la ciudad que acoge este barrio.
Sin embargo, sus innovaciones en materia de paneles fotovoltaicos, gestión de redes inteligentes, tecnología de baterías, vehículos autónomos de reparto o sistemas de vigilancia (entre muchos otros, entre los que se incluye la particularidad de resiliencia antisismos) sí podrán exportarse a otros entornos urbanos.
Los primeros residentes llegaron a este barrio en 2014, pero el proyecto espera durar muchas décadas. Buena parte de los retos del mismo están constituidos con un horizonte a 100 años vista, especialmente aquellos derivados de un mejor uso de la energía, la posible cohesión social o la esperada bajada de la delincuencia a largo plazo, para lo que habría que esperar varias generaciones con el objetivo de hacer mediciones adecuadas.
¿Qué proyectos acoge la ciudad?
Uno de los primeros proyectos de la ciudad está relacionado con un producto estrella de la marca: los paneles fotovoltaicos de Panasonic. Instalados sobre todos y cada uno de los tejados de Fujisawa SST, tienen por objetivo cubrir el 100% de las necesidades energéticas de las viviendas. Un sistema de baterías (en la imagen, entre ambas viviendas), almacena la energía del día.
Como otras ciudades asiáticas, Fujisawa SST está experimentando con la vigilancia masiva de sus habitantes en materia de seguridad. Con 50 cámaras instaladas por el recinto y varias patrullas físicas, el pequeño municipio pretende tener controlada cualquier tipo de delincuencia.
La movilidad eléctrica es uno de los pilares básicos de la comunidad, ya que impulsa dos sectores de negocio de la compañía: los coches y bicicletas eléctricos; y la fabricación de baterías de alta densidad energética. Los puntos de carga son ubicuos en la ciudad.
A finales de 2020, la compañía Panasonic comenzó a usar robots automatizados de entrega a domicilio por el interior de Fujisawa SST. Circulan a una velocidad extraordinariamente baja (4 km/h, similar a la marcha humana) con el objetivo de no herir a ningún ciudadano.
Un punto de aplicación tecnológica con evidentes características locales es la construcción de estas viviendas y redes eléctricas de forma que sean resistentes a los sismos. Ubicada entre fallas, Japón es conocido por la frecuencia e intensidad de sus terremotos, y hace décadas que desarrolla un mecanismo resiliente. En Fujisawa SST estas infraestructuras siguen funcionando durante y después de que la tierra se mueva.
No todo es tecnología en la ciudad. Su núcleo, una plaza llamada Fujisawa SST Central Park, acoge un edificio donde reunir a la ciudadanía para que decidan sobre su entorno y formen parte activa del desarrollo de este curioso barrio nipón.
Fujisawa SST, ciudad de empresa para obtener datos
El municipio al completo ha sido diseñado por Panasonic, que no es la primera empresa ni la última en diseñar ciudades de cero. A la ciudad de Pullman (Chicago), de Pullman Palace Car Co, se suman la Scotia (California) fundada por Pacific Lumber Co, Roebling (New Jersey) de John A. Roebling & Sons, o Ivrea de Olivetti (Italia) fundada por la marca Olivetti.
En los últimos años otras marcas han seguido este ejemplo, aunque con una aproximación diferente a la industrial. Mientras que en las primeras revoluciones industriales se buscaba mantener a los trabajadores en las inmediaciones de las fábricas, los nuevos planteamientos urbanos (como Woven City, de Toyota, también en Japón) persiguen datos y experimentación.
Completamente funcionales, estos reducidos asentamientos urbanos buscan convertirse en laboratorios de ideas y campo de pruebas para diferentes tecnologías que luego puedan ser usadas en otros asentamientos y municipios. Aunque no están exentos de críticas.
Algunas críticas a Fujisawa SST
La crítica más evidente al modelo de Fujisawa SST es precisamente su modelo urbano, que promueve las viviendas unifamiliares. Siendo el modelo de mayor impacto a nivel ambiental con mayor uso de agua, emisiones o gasto de energía per cápita, con peor desempeño económico debido a un mayor coste de los servicios públicos, una menor innovación derivada de la aglomeración y con mayor fractura social, con brechas derivadas de la estratificación en base a ingresos, no es precisamente el mejor punto de partida si el objetivo es la sostenibilidad a largo plazo.
Este problema concreto sí ha sido solucionado por otras ciudades niponas de la empresa, como la mencionada Woven City de Toyota, que promueve un urbanismo compacto de cercanía, pasear o usar la bicicleta como movilidad por defecto, y viviendas de bajo impacto.
La segunda crítica, a menudo desde medios occidentales, nace del uso de datos y ética asociada a la innovación de las marcas fundadoras de ciudades. En su libro ‘Los nueve gigantes’ (2021), Amy Webb señala el enorme problema de fractura social que podrían producir empresas grandes como Amazon, Apple o Google cuando desplieguen sus sistemas operativos a nivel de ciudades enteras.
Si ya existen ‘viviendas con ecosistema iOS/Siri’ o ‘viviendas Amazon/Echo’ en las que usuarios de otros sistemas encuentran incompatibilidades básicas al no poder interactuar con la domótica, este tipo de entornos urbanos podrían convertirse en islas aisladas que en la práctica solo admitan habitantes de sistemas compatibles. Temas sobre privacidad o experimentación con barrios enteros para extraer información comercial aparte.
Independientemente de estas críticas, no cabe duda de que de la ciudad surgirán desarrollos de interés no solo para las marcas presentes en la comunidad, sino también para los propios vecinos y las universidades que estudian el modelo de Fujisawa SST (que hace años que hacen publicaciones relacionadas). El aprendizaje está asegurado.
Imágenes | iStock/igaguri_1, Google Maps, Google Maps, Panasonic